sábado, 24 de septiembre de 2011

COLECTIVO DE PENSAMIENTO UNIVERSITARIO (CPU) EN UNIPAZ Y SU APUESTA AL CAMBIO INSTITUCIONAL.

La situación académico-administrativa en Unipaz se hace insostenible ante el manejo perverso e ineficiente de su modelo de gestión, que cumple diez (10) años en manos de académicos internos de la institución, que han venido privilegiando sus interés personales y grupales minúsculos, frente a las expectativas de crecimiento y desarrollo de los estamentos universitarios y de su entorno, obstaculizando de una u otra manera, cualquier intento externo de aportarle al cambio consensuado de la institución.
En nuestra practica estudiantil, a pesar de que la filosofía del proyecto educativo institucional y de sus prácticas académicas son de corte alineativo y, constituyen una mutilación de  nuestra conciencia, en el  Colectivo de Pensamiento Universitario (CPU)[1] que representamos, se ha incubado y desarrollado, un sentimiento y un pensamiento inmerso en nuestra conciencia, hacia la necesidad impostergable de adaptación personal, grupal e institucional al entorno.
Queremos apostarle al  Cambio, con vehemencia, confianza y seguridad. La motivación nuestra radica en la voluntad y sensibilidad del equipo de trabajo y de sus  simpatizantes, para comprender , interiorizar,  y encontrar espacios de intervención sensatos, reales y abiertos, en una propuesta de trabajo rectoral incluyente,participativa,propositiva y publica, que satisfaga intereses institucionales, más no individuales, que mire no solo el presente sino el futuro, qué tan solo tenga en cuenta el pasado como un referente para no caer en los mismos errores ,mas no como pretexto para pasar cuentas de cobro sin contemplación alguna. Un proyecto en donde la Academia  se constituya en  razón de su existencia, y en donde las áreas Administrativas y de apoyo liberen recursos para la ampliación de cobertura de servicios, y para el mejoramiento de la calidad. Un proyecto en donde la Investigación constituya el eje de la vida académica, y  el status, el  desempeño, la formación y la organización de los docentes, se ligue con las propuestas de mejoramiento de la educación que en la actualidad se imparte.
Nuestra apuesta al  Cambio debe estar planeada, y no obedecer a un accidente o coyuntura alguna, pero como el Cambio tiene que ver con las personas, no será posible acompañar propuesta alguna, si no cambiamos nosotros mismos, si el cambio no está dentro de nosotros, si no somos conscientes de la realidad institucional: evidencias hay por doquier, no nos acobardemos ante esta nueva posibilidad, que en anteriores contiendas rectorales no hemos aprovechado con suficiente madurez. A la rectoría de UNIPÁZ al igual que en nuestro entorno electoral colombiano, no se llega por programas, se llega con chequera, con intimidación y con tráfico de calificaciones, entre otras artimañas. En esta ocasión, el palo no está para cucharas, de esta aseveración damos fé como COLECTIVO DE PENSAMIENTO UNIVERSITARIO (CPU).
Comedidamente hacemos un llamado a los resistentes al Cambio que se avecina:
-Reconozcan a su interior y repliquen en su entorno más cercano, la necesidad al cambio, no se resistan, es inevitable, no es un problema de Pateo de Lonchera, es de supervivencia institucional, de apego a una conciencia crítica, que no ha podido aflorar con espontaneidad por las dadivas pasajeras, y los halagos superfluos de las administraciones universitarias.
-No tema ante la incertidumbre sobre su propia capacidad para adquirir nuevas destrezas, nosotros lo acompañaremos como garantes en ese proceso.
-No tema perder el poder individual o grupal, Usted siempre ha estado solo, Usted no ha contado con un líder rectoral, profesoral o administrativo motivador, Usted ha sido utilizado muchas veces, y cuando se ha dado cuenta, sólo su soledad, y su distanciamiento con sus compañeros, son su constante vivir.
-No tenga recelo ante los verdaderos motivos de parte nuestra para apoyar el Cambio institucional: nos cansamos de actuar instintivamente, de ser uno más del montón.
Contigo es posible, es un llamado a hacer UNIVERSIDAD, a encontrarnos con el ideario de sentar las bases para la consolidación de la Universidad del Magdalena medio; a volver a la esencia de UNIPAZ,usurpada  miserablemente por una dirigencia, que al igual que en ocasiones anteriores, utilizarán armas innobles para intentar la favorabilidad del voto rectoral, que sus actuaciones personales,morales,directivas y/o academicas,no le han merecido: no a las dádivas económicas, no al chantaje con las calificaciones y los proyectos de grado, no a la intimidación para conservar los puestos de trabajo: UNIPAZ deber votar por la UNIPAZ,pero no privilegiando más candidatos internos, que desde sus condiciones laborales, habiendo podido aportar al engrandecimiento institucional, han sido complices,unos pasivos, otros beligerantes(solo en época de elecciones rectorales),del resquebrajamiento institucional en todos los órdenes.


[1] CPU constituye un grupo de trabajo critico , estudioso, respetuoso, y propositivo de las problemáticas institucionales, regionales y del contexto, que afectan de una u otra manera la razón de Ser de UNPAZ,que propende por la concreción  de solidaridades  para hacer de UNIPAZ,una Universidad al servicio de las necesidades y aspiraciones de Barrancabermeja y del Magdalena medio.

INCERTIDUMBRE POR EL RUMBO DEL PROCESO DE LANZAMIENTO POR OCUPACION DE HECHO EN EL MUNICIPIO DE SABANA DE TORRES, EL CUAL FUE INVADIDO VIOLENTAMENTE.

La Asociación Campesina  de Santander  denunciamos  ante la Comunidad Nacional e Internacional, a las organizaciones defensoras de Derechos Humanos y al Procurador General de la Nación los siguientes.

HECHOS

Al día de hoy, 22  de  Septiembre de 2011, las autoridades del Municipio de Sabana de Torres no han hecho nada por evitar que se sigan violando los derechos fundamentales del compañero TAMAYO, quien ha solicitado se adelante el proceso de lanzamiento por ocupación de hecho el día 09 de agosto de 2011 ante el despacho del señor Alcalde Municipal, Dr. URIEL VELANDIA GUTIERREZ, quien se declaró impedido para conocer del proceso de lanzamiento  el día 11 de Agosto del presente año, trasladándolo  al Gobernador de Santander, Dr. HORACIO SERPA URIBE, el cual, el día 24 de Agosto el Secretario del Interior devolvió al Sr. Alcalde de Sabana de Torres por ser el competente. Han transcurrido más de 47 días sin que se protejan los derechos fundamentales a la posesión, a la vida, al trabajo, a  la tranquilidad y la seguridad, de lo cual se hubiera  decretado el STATU QUO para evitar los daños que se han ocasionado al día de hoy, al contrario, se ha permitido todo tipo de violación a los derechos fundamentales.El día sábado 17 de septiembre de 2011, siendo aproximadamente las 12:30 P.M., una camioneta doble cabina de color blanco, polarizada, de placas   KGT 560, marca  Nissan, se paró frente a la casa donde el defensor de derechos humanos  y dirigente agrario, Sr. Cesar  Augusto Tamayo estaba desarrollando una reunión con otros defensores de derechos humanos y dirigente de población desplazada, el Señor JESUS  COLORADO y miembros de la Subdirectiva de Asogras  en el barrio  Carvajal del municipio de Sabana  de Torres, de  lo cual se informó vía Avantel  a la Oficina de Derechos Humanos de la  Policía Nacional de la ciudad de Bucaramanga, al  Señor Sargento AMADOR, quien manifestó que se comunicaría con la Policía de Sabana de Torres sin que a la fecha se sepa que paso con dicha camioneta, en vista de que el señor Sargento no le informo nada sobre la camioneta al compañero nuevamente el día lunes  19 de Septiembre  se  comunicó    con la Oficina de DD. HH de la  Policía de Santander donde manifestaron que no sabían nada, pero como cosa extraña el día 20de Septiembre la misma camioneta fue vista saliendo del parqueadero de la Alcaldía de Sabana de Torres.


PETICIONES

PRIMERO: Solicitar  la intervención inmediata del Señor Procurador Agrario  de Santander    para que realice vigilancia especial a esta denuncia  pública,  de la cual se presentó querella de lanzamiento con fecha 09 de Agosto del presente año, ante el despacho del Señor Alcalde Dr. URIEL VELANDIA.

SEGUNDO: Solicitar la intervención inmediata de la Fiscal General de la Nación, Dra.  VIVIAN MORALES,  para que esta denuncia Pública  presentada por la Asociación Campesina Asogras, sea asumida con carácter de urgente.

TERCERO: Pedir la intervención del Señor Procurador General de la Nación, Dr. ALEJANDRO ORDOÑEZ, sobre este caso tan grave, donde se están violando derechos fundamentales del compañero Defensor de Derechos Humanos.

CUARTO: Solicitar al Señor Vicepresidente, DR. ANGELINO GARZON, para que haga seguimiento a esta  denuncia hecha por nuestra Asociación Campesina, en donde hay derechos fundamentales violados de los defensores de DD.HH, de lo cual hoy, el compañero se encuentra amenazado de muerte y desplazado.

QUINTO: Pedir  a quien corresponda asignar un esquema  de seguridad fuerte para garantizar la vida, la integridad personal y familiar  del compañero CESAR  AUGUSTO TAMAYO, para que de esta forma pueda seguir desarrollando su trabajo como defensor de Derechos Humanos y Dirigente Agrario en el Municipio de Sabana de Torres y en el Departamento de Santander, en donde Asogras tiene presencia.


SEXTO: Pedir la presencia y  el acompañamiento de la comunidad internacional, de las O.N.GS. Defensoras de DD. HH. Internacionales y Nacionales, por la gravedad de los hechos que estamos denunciando y  respaldarnos enviando comunicados al gobierno Colombiano  sobre esta grave situación del compañero Defensor de DD. HH.,  para garantizar la seguridad a la familia.

ASOGRAS SANTANDER

martes, 20 de septiembre de 2011

Grave situación de violación a los Derechos Humanos en la Universidad de Pamplona




El Observatorio de Derechos Humanos Iván David Ortiz, denuncia ante la sociedad colombiana en general, y en especial ante las organizaciones en defensa de los derechos humanos, nacionales e internacionales, la grave situación violatoria de los Derechos Humanos de la comunidad de la Universidad de Pamplona tras los hechos ocurridos en la madrugada del 20 de Septiembre.

Desde el Jueves 15 de Septiembre de 2011 el estudiantado de la Universidad de Pamplona, después de haber seguido el conducto regular para sus reclamos y no haber tenido respuesta alguna por parte de las directivas, decide entrar en dinámica de toma y asamblea permanente, debido al detrimento de la calidad en su educación y el elevado costo de las matriculas, el más alto de universidades públicas en el país.

En la madrugada del 20 de Septiembre de 2011, hacia la 1 de la mañana, en clara violación a la Autonomía Universitaria, poniendo en riesgo la integridad de la comunidad, y contra todo respeto de los Derechos Humanos el Escuadrón Móvil Anti Disturbios (ESMAD) ingresó al claustro, rompiendo una reja de la Universidad donde alrededor de 1000 estudiantes se encontraban dormidos en campamento por la toma de su claustro y a los cuales agredieron gravemente, esta intervención por parte del ESMAD ha reportado decenas estudiantes heridos varios de ellos, de gravedad y varios estudiantes detenidos, de los cuales no se cuenta con mayor información respecto a la judicialización que se les puede realizar.

En este momento, siendo las 8:30 de la mañana del 20 de Septiembre  el ESMAD aún se encuentra dentro de las instalaciones de la Universidad, agrediendo al estudiantado, lo cual implica una elevación del numero aun indeterminado de personas afectadas, y generando un ambiente de tensión hacia los estudiantes que se encuentran en las inmediaciones de la misma, por el peligro latente de algún tipo de confrontación que agrave los hechos aquí expuestos.

Rechazamos de forma vehemente la represión a los estudiantes, el ingreso del ESMAD a los campus y la criminalización de la protesta estudiantil, la militarización de los campus universitarios y toda acción de represión contra el estudiantado que demanda el respeto de sus derechos fundamentales,  en especial de aquella represión ejercida por la fuerza pública como agente estatal, y causante de escenarios de pánico y zozobra para los y las manifestantes.

Exigimos la presencia y el pronunciamiento de las autoridades correspondientes, respecto a esta situación para que la represión contra los mismos cese y se respeten los derechos humanos de la comunidad.

martes, 6 de septiembre de 2011

GRAN MARCHA NACIONAL

Miércoles 7 de septiembre gran marcha nacional por la defensa de la educación pública al servicio del pueblo y contra la ley actualmente vigente y su reforma a la educación superior.


COMUNICADO A LA COMUNIDAD NACIONAL E INTERNACIONAL

La Coordinación de Organizaciones Agrarias y Populares de Colombia, CONAP, organización clasista que reúne a diversos sectores del pueblo colombiano, defensores de la soberanía y la dignidad, expresada en reforma agraria integral y en soluciones reales a las causa sociales que han desatado el actual conflicto social y armado que aqueja a nuestra nación, expresamos que:

Acorde con nuestros objetivos decidimos en nuestra pasada asamblea del 17 y 18 de junio, convocar y participar activamente en el Encuentro Nacional de Paz “El Dialogo es la Ruta”, realizado en la ciudad de Barrancabermeja, Santander, del 12 al 15 de agosto del presente año, el cual reunió más de 20.000 personas de todas las regiones y sectores del país, expresando al unísono en su declaración final, la necesidad de la solución política al conflicto social y armado, la construcción de una hoja de ruta que articule las diferentes iniciativas de paz de las organizaciones sociales, y la generación de procesos constituyentes regionales que nos lleven a la construcción de un movimiento nacional empoderado que ponga en la agenda nacional la necesidad del dialogo como pieza fundamental de un cercano proceso de paz.

Denunciamos con fuerte preocupación como durante y después del encuentro las organizaciones sociales y populares miembros de la CONAP, han sido objeto de asesinatos, estigmatizaciones y señalamientos por parte de entidades gubernamentales y diversos medios oficiales de comunicación en los cuales se señala a compañeros y compañeras de sostener vínculos con grupos al margen de la ley, elevando los niveles de riesgo y provocando acciones oficiales y para oficiales sobre nuestros compañeros y compañeras y afectando nuestro trabajo local, regional y nacional.

Tras el encuentro y posterior regreso a las regiones, hemos sufrido la desaparición y posterior asesinato de uno de nuestros compañeros de la Organización de Trabajadores Campesinos del Caquetá, y la desaparición de otro de ellos; los señalamientos en contra de compañeros del Sindicato de Trabajadores Agrarios del Meta, Sintragrim, y de la Asociación de Trabajadores Campesinos del Tolima, Astracatol, más aun, cuando la respuesta del gobierno frente al encuentro de paz, fue la de bombardear zonas campesinas en el sur del Tolima, cercanas al municipio de Chaparral, generando desplazamiento, y grandes pérdidas de animales y enseres de los trabajadores del campo; todo esto, sin contar las numerosas llamadas de intimidación a compañeros antes y durante la realización del Encuentro.

Ante este panorama, exigimos al gobierno nacional se brinden garantías, para que todas las organizaciones miembros de la CONAP, puedan seguir realizando su trabajo político en defensa de la tierra y en beneficio del desarrollo de las conclusiones del encuentro por la paz “El Dialogo es la Ruta”. Así mismo, le hacemos responsable sobre los actuales y posteriores actos de vejamiento que se den en contra de compañeros y compañeras participes de la CONAP.

Solicitamos a la comunidad internacional, y en particular a las organizaciones defensoras de Derechos Humanos, a estar atentas a las difíciles situaciones que aquejan hoy a los campesinos y los montajes de los cuales se es objeto por considerar que la solución política y negociada es el camino hacia la paz. Llamamos a las Organizaciones nacionales e internacionales a seguir presionando al gobierno Colombiano a sentarse a negociar la paz en Colombia. Agradecemos la solidaridad internacional y ratificamos nuestro compromiso con el pueblo colombiano, latinoamericano y mundial en la construcción de un país digno y de un pueblo soberano.

Por la solución política y negociada al conflicto social y armado, paro cívico nacional!

CORDINACIÓN DE ORGANIZACIONES AGRARIAS Y POPULARES DE COLOMBIA
www.conapcolombia.org (ver denuncias)

MANIFIESTO POR LA TIERRA Y LA PAZ

EL DIALOGO ES LA RUTA

Los miles de asistentes al Encuentro nacional de comunidades campesinas, afrodescendientes e indígenas por la tierra y la paz de Colombia. El diálogo es la ruta, realizado en Barrancabermeja del 12 al 14 de 2011 declaramos frente a la sociedad colombiana y la comunidad internacional:

1. Hemos concluido nuestro encuentro con un balance de pleno éxito. Los propósitos que nos trazamos de analizar la situación del país se han cumplido con creces. Hemos considerando de manera específica nuestras preocupaciones por el futuro de nuestra tierra, nuestro territorio y nuestros recursos, por la democracia, la situación y la garantía de nuestros derechos, así como del estado de la guerra y las posibilidades de una solución política.

2. Estos resultados, son expresión de una multitudinaria manifestación y aspiración ciudadana, que se ha realizado en forma pública y ha sido transmitida por medios de comunicación. Los frutos de este encuentro son producto exclusivo de nuestro sacrificio y esfuerzo colectivo y anhelo por encontrar caminos para la paz.

3. Agradecemos el acompañamiento de la Iglesia, de la Gobernación de Santander y de la Alcaldía de Barrancabermeja, así como de la Comunidad internacional, especialmente de algunas de sus organizaciones comprometidas con las causas de los derechos humanos y de la paz. Su concurso ha sido del mayor significado.

4. Manifestamos nuestro rechazo frente a las políticas gubernamentales que durante la última década se han venido implantando en el país para promover un modelo económico que propicia la explotación intensiva de nuestra tierra y recursos naturales , favorece a las empresas transnacionales y los grupos económicos, acentúa los conflictos por la tierra y la lucha por el territorio, estimula nuevos procesos de expropiación, despojo y de desplazamiento forzado, deteriora radicalmente los procesos sociales y compromete nuestras condiciones de soberanía y seguridad alimentaria. Este modelo económico destruye la economía campesina, los territorios de las comunidades indígenas y afrodescendientes y produce un escalamiento de la dinámica del conflicto social y armado que agobia a nuestro país.

5. Expresamos nuestra preocupación frente al proyecto gubernamental de Ley general de tierras y de desarrollo rural, la ley de víctimas y de restitución de tierras y el Plan Nacional de desarrollo, porque no garantizan los derechos de los colombianos y favorecen el actual modelo minero energético no beneficioso para el medio ambiente y para el pueblo colombiano.

6. Afirmamos nuestro apoyo al proyecto de Ley de Reforma agraria integral, presentado por las organizaciones campesinas, construido por la Mesa de Unidad Agraria, y presentado en este encuentro, por considerar que él recoge en gran medida las aspiraciones de la población rural colombiana, y demandamos de la sociedad su más amplio respaldo.

7. La democracia en nuestro país y la generación de mejores condiciones para hacer efectivos y garantizar nuestros derechos demanda un nuevo modelo que posibilite el uso de nuestros recursos y riquezas, superando las profundas desigualdades económicas y sociales, en función del buen vivir de nuestra población.

8. Nos preocupa que pese al reconocimiento formal del conflicto colombiano por parte del gobierno actual y a sus manifestaciones acerca de que la llave de la paz no estaría extraviada, es evidente que la pretensión de la solución militar se encuentra en el primer lugar de la agenda gubernamental y responde a un equivocado concepto de "paz de vencedores y vencidos”. La historia del conflicto colombiano nos muestra que las soluciones militares no conducen a la paz. Por tanto, no podemos continuar atrapados por la perspectiva de un escalamiento de la guerra y de una creciente intervención militar extranjera. No queremos continuar nuestras vidas con la permanente amenaza de las bombas y las balas. Es hora de ponerle fin a la guerra. La solución política se constituye en una necesidad.

9. Somos conscientes que la perspectiva de la solución política posee muchos enemigos, especialmente aquellos que se benefician del estado de cosas existentes y de la sociedad de privilegios que les sirve de sustento. Desactivar la guerra desfavorece, además, a quienes han hecho de ella un negocio lucrativo. Los colombianos tenemos el derecho a propiciar conscientemente la generación de nuevas condiciones para emprender el camino que pueda conducir a un trámite distinto del basado en el ejercicio de la violencia-de manera que los conflictos que le son inherentes a nuestra sociedad, puedan transitar por la vía del dialogo la justicia social y la paz.

10.Tenemos la convicción acerca de la necesidad de avanzar en la concepción y materialización de una ruta de la paz, que tenga como próxima meta la conformación de un movimiento de alcance nacional con apoyo internacional con el mandato expreso de promover la construcción de la paz con justicia social y la solución política al conflicto social y armado. Caminar en esa dirección demanda la generación de un clima favorable. Es urgente trabajar todos juntos para consolidar una cultura de la paz. Consideramos que las partes comprometidas de manera directa en la confrontación deberían contemplar como gesto mutuo frente a la sociedad colombiana un cese bilateral de hostilidades, que abra la posibilidad del diálogo. Igualmente, la consideración de compromisos y acuerdos humanitarios que permitan parar la violencia contra la población civil y todos los crímenes atroces.

11. Las declaraciones generales sobre la paz y el dialogo son insuficientes y muchas veces se han acompañado de escalamientos en la guerra. Por ello este Encuentro exige gestos y hechos de todas las partes que signifiquen respuestas positivas a los reclamos de la población, de las comunidades campesinas, indígenas y afrodescendientes: alto al desplazamiento forzado y al despojo; respeto incondicional a los derechos de los niños, niñas y mujeres, garantía y respeto a los derechos de las víctimas; no militarización de los territorios, respeto a la autonomía de los pueblos indígenas. Parar la guerra y construir la paz. Es la hora de la solución política.

12. Necesitamos hacer realidad la idea consistente en que el diálogo es la ruta. Materializar ello implica, sobre todo, las más amplia participación social y popular. La solución política no puede ser un asunto de competencia exclusiva de las partes comprometidas de manera directa en la contienda militar. “Todas las voces todas, todas las manos todas”, de este país requieren ser escuchadas y movilizadas para sentar las bases que nos permitan avanzar hacia la paz con justicia social. Ello supone una ardua tarea de organización, politización y movilización social, que deseamos asumir con todos aquellos que estén dispuestos a acompañarla, y que se suma a todos los esfuerzos e iniciativas sociales y populares que a través de diferentes vías y mediante variadas expresiones organizativas se vienen desarrollando en el país. Ese espacio se debe construir y ampliar garantizando el respeto a las organizaciones sociales y a su autonomía. Su punto de partida se encuentra en las innumerables manifestaciones de la acción colectiva social y popular, en los diferentes procesos organizativos que con enfoques distintos y diversas perspectivas políticas se han venido gestando en nuestro país durante los últimos años.

13. Proponemos que todos esos esfuerzos, articulados entre sí y sumados a otras expresiones de la organización social en el ámbito local o atendiendo preocupaciones sectoriales, étnicas, o de género, confluyan en la preparación y realización de constituyentes regionales, espacios de soberanía popular y participación ciudadana, concebidos como mecanismos de construcción de paz y justicia social y por la solución política. Su diseño, debe de posibilitar la consideración de la problemática general del conflicto y sus salidas, así como el abordaje de las respectivas especificidades regionales. Estos procesos suponen la participación activa y directa de los más amplios sectores sociales, atendiendo su diversidad y pluralidad, y debe ser conducente a la definición precisa de mandatos regionales.

14. Estas dinámicas representan espacios de confluencia hacia una Asamblea nacional de Constituyentes y procesos regionales por la paz. De la asamblea debería salir un mandato nacional por la solución política y la paz con justicia social, con su correspondiente definición programática y de acción política. Todo este esfuerzo tiene una posibilidad más cierta si logra acompañarse de la comunidad internacional

15. Las conclusiones de este encuentro, producto de nuestra ardua labor en diferentes mesas de trabajo, así como esta declaración política, serán entregadas a la sociedad colombiana, al Gobierno central y demás poderes del Estado, así como a las guerrillas de las FARC-EP y del ELN, con el fin de hacer expresa nuestra voluntad y aspiración porque se exploren con urgencia acciones tendientes a desatar el nudo de la confrontación y avanzar hacia la solución política y la paz. Estamos convencidos que ese es el sentir creciente del pueblo colombiano: Vivir en paz con justicia social.

16. Invitamos a todas las organizaciones participantes a impulsar y participar en los diferentes escenarios e iniciativas para seguir fortaleciendo las apuestas de este encuentro.

ENCUENTRO NACIONAL DE COMUNIDADES CAMPESINAS, INDÍGENAS, AFRODESCENDIENTES POR TIERRA Y LA PAZ DE COLOMBIA.

ENCUENTRO NACIONAL DE COMUNIDADES CAMPESINAS - AFRODESCENDIENTES E INDÍGENAS POR LA TIERRA Y LA PAZ DE COLOMBIA


Encuentro Nacional de Campesinos... por aquinosvemos


COLECTIVO OJO A LA CALLE


CONTRAVIA


Alba TV

MANIFIESTO POR LA TIERRA Y LA PAZ


Los miles de asistentes al Encuentro nacional de comunidades campesinas, afrodescendientes e indígenas por la tierra y la paz de Colombia. El diálogo es la ruta, realizado en Barrancabermeja del 12 al 14 de agosto de 2011 declaramos frente a la sociedad colombiana y la comunidad internacional:

1. Hemos concluido nuestro encuentro con un balance de pleno éxito. Los propósitos que nos trazamos de analizar la situación del país se han cumplido con creces. Hemos considerando de manera específica nuestras preocupaciones por el futuro de nuestra tierra, nuestro territorio y nuestros recursos, por la democracia, la situación y la garantía de nuestros derechos, así como del estado de la guerra y las posibilidades de una solución política.

2. Estos resultados, son expresión de una multitudinaria manifestación y aspiración ciudadana, que se ha realizado en forma pública y ha sido transmitida por medios de comunicación. Los frutos de este encuentro son producto exclusivo de nuestro sacrificio y esfuerzo colectivo y anhelo por encontrar caminos para la paz.

3. Agradecemos el acompañamiento de la Iglesia, de la Gobernación de Santander y de la Alcaldía de Barrancabermeja, así como de la Comunidad internacional, especialmente de algunas de sus organizaciones comprometidas con las causas de los derechos humanos y de la paz. Su concurso ha sido del mayor significado.

4. Manifestamos nuestro rechazo frente a las políticas gubernamentales que durante la última década se han venido implantando en el país para promover un modelo económico que propicia la explotación intensiva de nuestra tierra y recursos naturales , favorece a las empresas transnacionales y los grupos económicos, acentúa los conflictos por la tierra y la lucha por el territorio, estimula nuevos procesos de expropiación, despojo y de desplazamiento forzado, deteriora radicalmente los procesos sociales y compromete nuestras condiciones de soberanía y seguridad alimentaria. Este modelo económico destruye la economía campesina, los territorios de las comunidades indígenas y afrodescendientes y produce un escalamiento de la dinámica del conflicto social y armado que agobia a nuestro país.

5. Expresamos nuestra preocupación frente al proyecto gubernamental de Ley general de tierras y de desarrollo rural, la ley de víctimas y de restitución de tierras y el Plan Nacional de desarrollo, porque no garantizan los derechos de los colombianos y favorecen el actual modelo minero energético no beneficioso para el medio ambiente y para el pueblo colombiano.

6. Afirmamos nuestro apoyo al proyecto de Ley de Reforma agraria integral, presentado por las organizaciones campesinas, construido por la Mesa de Unidad Agraria, y presentado en este encuentro, por considerar que él recoge en gran medida las aspiraciones de la población rural colombiana, y demandamos de la sociedad su más amplio respaldo.

7. La democracia en nuestro país y la generación de mejores condiciones para hacer efectivos y garantizar nuestros derechos demanda un nuevo modelo que posibilite el uso de nuestros recursos y riquezas, superando las profundas desigualdades económicas y sociales, en función del buen vivir de nuestra población.

8. Nos preocupa que pese al reconocimiento formal del conflicto colombiano por parte del gobierno actual y a sus manifestaciones acerca de que la llave de la paz no estaría extraviada, es evidente que la pretensión de la solución militar se encuentra en el primer lugar de la agenda gubernamental y responde a un equivocado concepto de "paz de vencedores y vencidos”. La historia del conflicto colombiano nos muestra que las soluciones militares no conducen a la paz. Por tanto, no podemos continuar atrapados por la perspectiva de un escalamiento de la guerra y de una creciente intervención militar extranjera. No queremos continuar nuestras vidas con la permanente amenaza de las bombas y las balas. Es hora de ponerle fin a la guerra. La solución política se constituye en una necesidad.

9. Somos conscientes que la perspectiva de la solución política posee muchos enemigos, especialmente aquellos que se benefician del estado de cosas existentes y de la sociedad de privilegios que les sirve de sustento. Desactivar la guerra desfavorece, además, a quienes han hecho de ella un negocio lucrativo. Los colombianos tenemos el derecho a propiciar conscientemente la generación de nuevas condiciones para emprender el camino que pueda conducir a un trámite distinto del basado en el ejercicio de la violencia-de manera que los conflictos que le son inherentes a nuestra sociedad, puedan transitar por la vía del dialogo la justicia social y la paz.

10. Tenemos la convicción acerca de la necesidad de avanzar en la concepción y materialización de una ruta de la paz, que tenga como próxima meta la conformación de un movimiento de alcance nacional con apoyo internacional con el mandato expreso de promover la construcción de la paz con justicia social y la solución política al conflicto social y armado. Caminar en esa dirección demanda la generación de un clima favorable. Es urgente trabajar todos juntos para consolidar una cultura de la paz. Consideramos que las partes comprometidas de manera directa en la confrontación deberían contemplar como gesto mutuo frente a la sociedad colombiana un cese bilateral de hostilidades, que abra la posibilidad del diálogo. Igualmente, la consideración de compromisos y acuerdos humanitarios que permitan parar la violencia contra la población civil y todos los crímenes atroces.

11. Las declaraciones generales sobre la paz y el dialogo son insuficientes y muchas veces se han acompañado de escalamientos en la guerra. Por ello este Encuentro exige gestos y hechos de todas las partes que signifiquen respuestas positivas a los reclamos de la población, de las comunidades campesinas, indígenas y afrodescendientes: alto al desplazamiento forzado y al despojo; respeto incondicional a los derechos de los niños, niñas y mujeres, garantía y respeto a los derechos de las víctimas; no militarización de los territorios, respeto a la autonomía de los pueblos indígenas. Parar la guerra y construir la paz. Es la hora de la solución política.

12. Necesitamos hacer realidad la idea consistente en que el diálogo es la ruta. Materializar ello implica, sobre todo, las más amplia participación social y popular. La solución política no puede ser un asunto de competencia exclusiva de las partes comprometidas de manera directa en la contienda militar. “Todas las voces todas, todas las manos todas”, de este país requieren ser escuchadas y movilizadas para sentar las bases que nos permitan avanzar hacia la paz con justicia social. Ello supone una ardua tarea de organización, politización y movilización social, que deseamos asumir con todos aquellos que estén dispuestos a acompañarla, y que se suma a todos los esfuerzos e iniciativas sociales y populares que a través de diferentes vías y mediante variadas expresiones organizativas se vienen desarrollando en el país. Ese espacio se debe construir y ampliar garantizando el respeto a las organizaciones sociales y a su autonomía. Su punto de partida se encuentra en las innumerables manifestaciones de la acción colectiva social y popular, en los diferentes procesos organizativos que con enfoques distintos y diversas perspectivas políticas se han venido gestando en nuestro país durante los últimos años.

13. Proponemos que todos esos esfuerzos, articulados entre sí y sumados a otras expresiones de la organización social en el ámbito local o atendiendo preocupaciones sectoriales, étnicas, o de género, confluyan en la preparación y realización de constituyentes regionales, espacios de soberanía popular y participación ciudadana, concebidos como mecanismos de construcción de paz y justicia social y por la solución política. Su diseño, debe de posibilitar la consideración de la problemática general del conflicto y sus salidas, así como el abordaje de las respectivas especificidades regionales. Estos procesos suponen la participación activa y directa de los más amplios sectores sociales, atendiendo su diversidad y pluralidad, y debe ser conducente a la definición precisa de mandatos regionales.

14. Estas dinámicas representan espacios de confluencia hacia una Asamblea nacional de Constituyentes y procesos regionales por la paz. De la asamblea debería salir un mandato nacional por la solución política y la paz con justicia social, con su correspondiente definición programática y de acción política. Todo este esfuerzo tiene una posibilidad más cierta si logra acompañarse de la comunidad internacional.

15. Las conclusiones de este encuentro, producto de nuestra ardua labor en diferentes mesas de trabajo, así como esta declaración política, serán entregadas a la sociedad colombiana, al Gobierno central y demás poderes del Estado, así como a las guerrillas de las FARC-EP y del ELN, con el fin de hacer expresa nuestra voluntad y aspiración porque se exploren con urgencia acciones tendientes a desatar el nudo de la confrontación y avanzar hacia la solución política y la paz. Estamos convencidos que ese es el sentir creciente del pueblo colombiano: Vivir en paz con justicia social.

16. Invitamos a todas las organizaciones participantes a impulsar y participar en los diferentes escenarios e iniciativas para seguir fortaleciendo las apuestas de este encuentro.
Encuentro nacional de comunidades campesinas, afrodescendientes e indígenas por la tierra y la paz de Colombia

Barrancabermeja 14 de agosto de 2011
La universidad tiene la obligación y el deber histórico de desarrollar el pensamiento crítico, científico, creativo y artístico, de generar los espacios de debate, de argumentación y de discusión que permitan aportar desde allí a los diferentes sectores de la sociedad que contribuyan a su vez al fortalecimiento del tejido social y a las  transformaciones sociales que el país requiere y necesita.
Es por esto que ante las diferentes necesidades que azotan a cada una de nuestras comunidades, se hace necesario que el vínculo que tiene la universidad pública con la sociedad sea una realidad y a partir de estos hechos que los estudiantes, maestros, campesinos, indígenas, afrodescendientes, adultos mayores y todo miembro de la sociedad en general, que observe en su entorno condiciones que lo lleven a cuestionarse y a plantearse soluciones en pro del beneficio colectivo forme parte de un proyecto que promueva  el desarrollo de una comunidad determinada a partir de los conocimientos y las experiencias de las mismas comunidades y fortaleciendo de este modo el debe ser de  la universidad.
Asi que  como estudiantes que comprenden que la Universidad es una institución que tiene una relación directa con los barrios, el campo y la ciudad, porque es ahí donde se desarrollaran los distintos procesos que aportaran a la verdadera practica del conocimiento,  atendamos y tengamos la disposición de llevar el conocimiento que hemos adquirido, que es un conocimiento social , a cada una de nuestras comunidades porque la transformación debe darse desde la construcción de una educación popular.
Es por esto que hacemos un llamado a aquellos estudiantes con posiciones críticas que se identifique con la necesidad de contribuir al fortalecimiento del tejido social, en las zonas agrarias del departamento.
A los estudiantes que estén interesados en fortalecer  el trabajo en los barrios populares, como parte de su labor y practica académica.
A aquellos que estén interesados en aportar al fortalecimiento de la educación, que permita consolidar un trabajo con los estudiantes de secundaria, primaria y miembros de las comunidades interesados en la construcción de una educación verdaderamente al servicio del pueblo.

¿QUIENES SOMOS?

Somos un grupo de estudiantes universitarios que ante la crisis económica, social, política y cultural que aqueja a nuestro país y más específicamente a nuestra región, nos sentimos identificados con el pueblo colombiano que es quien realmente vive, sufre y se ve afectado por cada una de estas problemáticas, y al ser parte de la universidad pública y del pueblo colombiano,  consideramos que esta debe contribuir a mejorar las condiciones de vida de la mayoría y es por esto que estamos en total desacuerdo con que la función de la universidad debe ser la de “educar” a individuos lo “suficientemente preparados”, para que salgan a formar parte del sistema predominante que día a día ahonda más las condiciones de desigualdad del país;  ya que la Universidad pública es financiada por todos y todas, es decir, debe estar al servicio de las mayorías que durante siglos han estado marginadas por las minorías.

PROPUESTA

Los colectivos de Pensamiento Transformador proponemos que como miembros de la sociedad y a su vez como estudiantes organizados de la Universidad Pública se debe enfocar el trabajo en pro de:

  • Contribuir a la transformación en la medida que el papel de la Universidad tenga como objetivo fundamental, el formar, discutir y dialogar; para que los miembros de su comunidad aporten a las transformaciones sociales que el país requiere.
  • Integrar el sector estudiantil, a los diversos sectores sociales, que fortalezcan el tejido social.
  • Aportar al sector Agrario, en proyectos que promuevan el fortalecimiento de las economías campesinas, que se enfoque en alcanzar modelos de producción comunitarios que vaya  del campesino para el campesino, donde la labor de los miembros del colectivo sea la de prestar asesoría, evaluar los proyectos tomando como base las experiencia de los que saben, es decir de los campesinos, y trabajar a  favor del beneficio colectivo de la comunidad.
  •  Contribuir al trabajo en los Barrios populares que permitan el desarrollo de los mismos y que vinculen directamente a su población con la academia.
  • Construir desde el fortalecimiento de cada uno de los colectivos de trabajo la educación popular,que desde las aulas enriquezca el movimiento social y los diferentes procesos que desde una visión colectiva aporten al mismo.
  • Unir la teoría impartida en las aulas a una verdadera practica, que nos permita como estudiantes criticar, cuestionar y buscar soluciones a las realidades históricas, desde la perspectiva de pensar nuestra comunidad.

NUESTRO PENSAMIENTO

Se basa en la interpretación de la sociedad de manera consecuente y coherente con la realidad que vive, es un pensamiento crítico, argumentativo, propositivo y transformador, que está abierto al debate que contribuya a la búsqueda e implementación de soluciones científicas que subviertan el orden social establecido por la clase imperante.